La comarca de La Garrotxa, en el corazón de Cataluña, es famosa por sus paisajes volcánicos, su naturaleza exuberante y, sobre todo, sus pintorescos pueblos llenos de historia y encanto. En este post te presentamos los pueblos más bonitos de La Garrotxa, para que los incluyas en tu itinerario durante tu visita. ¡Perfectos para quienes buscan tranquilidad, cultura y belleza natural!
Besalú: El Icono Medieval de Cataluña
Besalú es, sin duda, uno de los pueblos más emblemáticos de La Garrotxa. Su impresionante puente románico sobre el río Fluvià es una de las imágenes más reconocibles de la región.
Qué no te puedes perder en Besalú:
- Puente Medieval: Perfecto para tus fotos y entrada al casco histórico.
- Call Jueu: Un paseo por la antigua judería, lleno de historia.
- Micvé y sinagoga: Restos del pasado judío de la localidad.
Castellfollit de la Roca: El Pueblo sobre un Precipicio
Castellfollit de la Roca es espectacularmente único gracias a su ubicación: el pueblo está construido sobre un risco de basalto de más de 50 metros de altura.
Lugares imprescindibles en Castellfollit de la Roca:
- Mirador del risco: Disfruta de vistas impresionantes al valle.
- Iglesia de Sant Salvador: Situada al borde del precipicio.
- Calles estrechas: Pasea por su casco antiguo y siente su autenticidad.
Santa Pau: Puerta al Parque Natural de la Zona Volcánica
Ubicado en pleno corazón del Parque Natural de la Zona Volcánica de La Garrotxa, Santa Pau es un pueblo tranquilo con un encanto especial.
Qué ver y hacer en Santa Pau:
- Plaza Mayor: Con sus arcos medievales y ambiente histórico.
- Castillo de Santa Pau: Construcción medieval con mucha historia.
- Excursiones cercanas: Visita los volcanes Santa Margarida y Croscat, o el bosque de La Fageda d’en Jordà.
Olot: La Capital de La Garrotxa
Olot combina su rol como centro urbano de la región con un entorno natural privilegiado. Rodeada de volcanes, es el punto de partida ideal para explorar La Garrotxa.
Qué no perderse en Olot:
- Volcán Montsacopa: Accesible a pie desde el centro de la ciudad.
- Museo de los Volcanes: Ideal para conocer la historia geológica de la región.
- Mercado de Olot: Perfecto para degustar productos locales.
Hostalets d’en Bas: Postales de La Garrotxa
Este pequeño pueblo, situado en el valle de Bas, parece sacado de un cuento de hadas. Sus casas de piedra decoradas con flores son un ejemplo de la arquitectura tradicional de la región.
Qué hacer en Hostalets d’en Bas:
- Calle Teixeda: Su calle principal es una de las más fotografiadas de La Garrotxa.
- Ruta del Carrilet: Perfecta para ciclistas y senderistas.
- Cascadas cercanas: Explora la naturaleza en los alrededores
Visitar estos pueblos es una experiencia inolvidable, y nuestra recomendación es que elijas un alojamiento estratégico para explorarlos cómodamente.
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