La Garrotxa es famosa por su impresionante paisaje volcánico, que ofrece una experiencia única para los amantes de la naturaleza y la aventura. Si estás planeando tu próximo viaje, no te pierdas la oportunidad de explorar los volcanes de la región.
Volcán Croscat
El Volcán Croscat es uno de los más jóvenes y grandes de la península ibérica, con una altura de 786 metros. Este volcán presenta una característica distintiva: un corte transversal en su flanco, resultado de la extracción de materiales volcánicos durante años. Este corte permite ver las capas internas del volcán, lo que lo convierte en un lugar fascinante para los visitantes interesados en la geología.
2. Volcán Santa Margarida:
El Volcán Santa Margarida es conocido por su cráter, que alberga una ermita románica del mismo nombre. Con una altitud de 766 metros, este volcán ofrece una mezcla única de naturaleza y patrimonio histórico. Los visitantes pueden disfrutar de una caminata hasta el cráter y explorar la ermita en su interior, lo que proporciona un entorno tranquilo y pintoresco.
3. Volcán Montsacopa:
El Volcán Montsacopa, también conocido como el volcán de Olot, es un volcán urbano situado en el centro de la ciudad. Con una altitud de 510 metros, este volcán extinto ofrece impresionantes vistas panorámicas de Olot y sus alrededores. Además, en la cima se encuentran dos antiguas ermitas y un mirador, lo que lo convierte en un destino popular para los turistas.
4. Volcán del Puig de la Costa:
El Volcán del Puig de la Costa es uno de los numerosos conos volcánicos que forman el paisaje de la Garrotxa. Este volcán se distingue por su forma y su vegetación exuberante, que cambia de color según la estación del año. Es un lugar ideal para los amantes del senderismo y la naturaleza, ya que ofrece rutas bien señalizadas y vistas espectaculares de la región.
